El pedido de una sociedad que adapte y no excluya tiene que ver con darle la posibilidad de integrarse a aquellos que menos herramientas tienen, para que también puedan luchar por un desarrollo personal. Desde su lugar, Barbara Ifrán cumplió su capacitación de Acompañante Terapéutica en el Centro Educativo Alem y expresó su felicidad luego de ver los pasos iniciales de progreso en sus pacientes. “Logramos bastantes objetivos“

En una sociedad competitiva, cada vez son menos las puertas que se le abren a los más vulnerables para poder insertarse en el mercado laboral, como así también fomentar sus relaciones interpersonales. Y depende de cada uno de nosotros ayudar para cambiar las realidades que no nos dejan del todo conformes, con trabajo y dedicación, para vivir una realidad más justa.
Barbara tiene una pasión clara: la de ayudar a aquellos que realmente necesitan de especialistas para potenciar las posibilidades de igualdad entre todos los ciudadanos. Y luego de unos meses de compañía terapéutica, que se empiecen a ver cambios es algo que la llena de orgullo a ella y a los familiares de la niña, a la que estimula en su colegio.
“Me gustaría recomendarle a mucha gente que realice esta capacitación, para poder crear herramientas para que la sociedad se adapte a ellos y no excluirlos en nada”, enfatizó Barbara acerca de la situación general, mientras que en su caso particular sumó: “Estoy súper contenta con mi paciente, ya logramos bastante objetivos”.
A su vez, Bárbara tiene en claro su objetivo de recibirse como Licenciada en Psicología, pero consciente de que es un recorrido que le llevará algunos años por cumplir y que deberá sacar a relucir su perseverancia, las urgencias económicas y laborales la llevaron a ganar experiencia con una formación más ajustada a su realidad y pasiones, para plantear un panorama que le permitan sostener sus finalidades.
De este modo, luego de analizar diferentes alternativas, optó por completar la capacitación en Acompañante Terapéutico, muy ligado a algunos objetivos de los futuros psicólogos. “Me encanta mi trabajo”, celebró, mientras contaba que las devoluciones de los familiares sobre el crecimiento de la niña son más que optimistas y la invitan a seguir proyectando nuevas metas.

“Elegí acompañante terapéutico porque me gusta ayudar a las personas que lo necesiten, me interesa conocer como trabaja el cerebro, los pensamientos y emociones de diferentes personas. Además lo elegí porque tiene una buena salida laboral y acompaña a la carrera de Psicología que estoy estudiando”, remarcó, luego de haber rendido sus últimos exámenes en febrero de este año.
En sintonía, se refirió a su recorrido estudiantil por el Centro Educativo Alem: “Al CEA lo conocí porque una conocida hizo el curso de extraccionista y tuvo una buena experiencia, así que me lo recomendó. La verdad fue un curso súper lindo, mis compañeras unas divinas, amables y solidarias. La profe Mariel es una genia, explicaba súper bien, se preocupaba por nosotras y nos pudo dar las herramientas necesarias”.
Si sos alumno o parte del Centro Educativo Alem y tenes una historia para contar comunicate a germanzavala96@gmail.com
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